La alergia consiste en una reacción exagerada de nuestro organismo a determinadas sustancias externas o partículas denominadas alérgenos, que identifica como extrañas.
La alergia puede aparecer en cualquier momento y a cualquier sustancia. Sin embargo, los alérgenos más comunes son pólenes, ácaros, picaduras de insectos, determinados alimentos, medicamentos, epitelios de animales, etc.
En primavera la alergia al polen se ve acentuada por el elevado número de partículas de polen en el aire que trae consigo la polinización, provocando rinitis alérgica. Se trata de una reacción alérgica de hipersensibilidad inmediata provocada por alérgenos aéreos. Los cinco síntomas más frecuentes son:
- Estornudos repetidos
- Congestión e inflamación de la mucosa nasal
- Cefalea
- Rinorrea (Abundante secreción de moco)
- Enrojecimiento ocular, inflamación y lagrimeo
Se debe tener en cuenta que las mayores concentraciones de polen se suelen producir a primeras horas de la mañana y a últimas de la tarde, y se acumulan principalmente en parques, jardines y zonas abiertas…
Existen webs en las que se puede consultar los niveles de los distintos tipos de pólenes, como www.polenes.com, que se deben tener en cuenta, ya que se recomienda tener ciertas medidas de prevención, principalmente los días de máximas concentraciones. Entre otras:
- Evitar realizar actividades al aire libre.
- Mantener las ventanas cerradas el mayor tiempo posible.
- Proteger los ojos del contacto directo con el aire para lo que resulta útil el empleo de gafas que sean lo más envolvente posible. Evitan, en parte, la entrada de polen en los ojos y alivian las irritaciones oculares
- Lavar con agua abundante la nariz y los ojos para aliviar los efectos de la alergia.
- El tabaco es una sustancia que incrementa la respuesta alérgica, por lo que debes evitar fumar así como frecuentar lugares donde se acumule humo de tabaco.
- Se recomienda el uso de mascarillas o filtros nasales, como los filtros Noosk, capaces de bloquear el 100 % del polen y los ácaros.
Pero atención, si tomas antihistamínicos, evita conducir, ya que éstos provocan somnolencia.
